domingo, 12 de febrero de 2012



Antonio Buero Vallejo (1916 - 2000).
Historia de una escalera y Hoy es fiesta
  

    Antonio Buero Vallejo está considerado como el mejor dramaturgo español contemporáneo. En 1933, ingresó en la Escuela de Bellas Artes de Madrid, pero su vocación pictórica fue cortada por la guerra civil de 1936 – 1939. Dedicado a la soledad, al pensamiento y a la lectura durante muchos años, afloró su vena dramática para bien de las letras españolas. 


    De su trabajo ha surgido el teatro de más altura, tensión y trascendencia de la posguerra española.


     Con Historia de una escalera, hito en la recuperación teatral de España, ganó en 1949 el premio Lope de Vega. En 1972, ingresó en la Real Academia Española. En 1986, recibió el premio Cervantes y en 1996, el Nacional de las Letras, siendo la primera vez que este premio se concede a un autor exclusivamente dramático.


    “Buero supo convertir en materia artística la difícil cotidianidad de las clases menos privilegiadas y reflejar a través de estos seres insignificantes de aquel aquí y ahora los obstáculos con los que tropiezan hombres y mujeres de cualquier época.” 

(Introducción de Virtudes Serrano)



Programa de entrevistas “A FONDO” (1976-1981)

ENTREVISTA de Joaquín Soler Serrano a ANTONIO BUERO VALLEJO
 












¿Qué hay en esa escalera?...

En esa escalera hay frustración, tanto individual como colectiva.


    Desde el comienzo del drama queda retratada la psicología de los personajes principales: Fernando y Urbano.

     Es común, en ambos, una abierta disconformidad con el medio social en que viven y una esperanza de un futuro mejor. Ahora bien, se diferencian radicalmente en su manera de concebir ese futuro mejor, de luchar por él. Fenando es un ser indivudualista e insolidario, mientras que Urbano habla de sindicalismo y solidaridad.


    Tanto Fernando como Urbano no llegarán a ninguna parte y seguirán viviendo una existencia sórdida; continuarán subiendo y bajando una escalera impasible, y la vida se les irá de las manos sin poder realizar en ella ese destino mejor al que aspiraban en sus años juveniles. Ambos desembocan en el más completo fracaso, pero por razones distintas: mientras Fernando se cierra las puertas a sí mismo, Urbano naufragará por causas externas, ya que la guerra civil y Franco (en ningún momento mencionado explícitamente en la obra) hacen imposible su sueño sindical.


    El fracaso no se reduce únicamente a un proyecto social o profesional, también les alcanza de lleno en la vida familiar. Fernando, enamorado de Carmina, contrae matrimonio con Elvira, hija de un pequeño comerciante con cierta fortuna económica, fortuna que será la causa del matrimonio.


    Es Urbano quien se casa con Carmina, pero Carmina no le quiere; y ambos matrimonios, contruidos sobre cimientos frágiles, no funcionarán.


     El ambiente opresivo en el que viven los personajes aparece retratado en el drama por múltiples datos, pero en especial se materializa simbólicamente en la escalera de vecindad, una escalera que no lleva a ningún sitio. Sin embargo, el final del drama deja una puerta abierta a la esperanza. Fernando y Carmina (hijos) representan la “posibilidad” de que se convierta en realidad lo que para sus progenitores fue sólo un deseo. Será el espectador quien decida, tras caer el telón, la respuesta afirmativa o negativa a esta “posibilidad”.








sábado, 11 de febrero de 2012



Diferentes puestas en escena de Tres sombreros de copa




   En 1932 Miguel Mihura escribió Tres Sombreros de Copa, esta obra no se estrenó hasta 1952. Desde entonces no se ha parado de representar en todo el mundo.


Cita de Eugène Ionesco:

“Esta obra de Mihura exige un pequeño esfuerzo, una cierta agilidad de espíritu por parte del lector o espectador: aprender lo racional a través de lo irracional; pasar de un concepto de la realidad a otro; de la vida al sueño, del sueño a la vida.”






DONESTARG, 7. SEPTEMBER 2006



Vídeos:





Concurso de teatro escolar en español 2007-2008

     Los días 7 y 8 de febrero se celebró en Varsovia el III Concurso de Teatro Escolar en Español para los alumnos de las SS.BB. de Polonia.

     Catorce grupos, representantes de la mayor parte de las Secciones Bilingües de Polonia, participaron en el Concurso resultando ganadores los grupos de:

-          Liceo XXII de Varsovia, con la obra “Bodas de Sangre” de García Lorca.

-          Liceo III de Gdrarísk, con la obra “Tres sombreros de copa” de Miguel Mihura:





15.10.08 Diario Las Provincias

La obra 'Tres sombreros de copa' en el teatro Talía


     Desde el jueves 16 de octubre y hasta el próximo 16 de noviembre se podrá ver en el Teatro Talía el espectáculo de Teatres de la Generalitat “Tres sombreros de copa” obra cumbre de la producción del dramaturgo Miguel Mihura


     El veterano Antonio Díaz Zamora se ha encargado de la puesta en escena y ha contado un equipo compuesto por Paco Azorín (escenografía); Juanjo Llorens (iluminación); Miquel Crespi (vestuario) y Amparo Zamora (dirección coreográfica). El reparto está compuesto por 14 actores y actrices valencianos de la categoría de Sergio Caballero, Inés Díaz, Pep Cortés, Rafael Calatayud, Pep Sellés, María Albiñana, Paloma Maldonado, Estela Martínez, Manuel Puchades, Julio Salvi, Pilar Martínez, Nacho Diago, Abel Zamora y Martín Cases Vidal, este reparto tiene la particularidad de reunir en su seno a tres generaciones de la escena valenciana, tal y como demandaban los personajes de la función, y que ha sido posible reunir para esta producción. 




      La producción de “Tres sombreros de copa”, y su estreno en el Teatro Talía forma parte de la decidida apuesta por el papel del Talia y por el impulso al teatro valenciano en la celebración del centenario de este teatro que abrió sus puertas en 1908.

  






Teatre Circ. 2011







Escuela Superior de Arte Dramático de Asturias. Trabajo final de carrera, 4º curso 2010–11
Abril 2011. Teatro Riera. Villaviciosa. Asturias.







Tres sombreros de copa: Alberto Amarilla _ Don Rosario 

 
(imagen extraída de su blog promocional de actor)




Varios:
















 


Versión de 1978 representada para televisión en el programa "Estudio 1". En esta escena intervienen María José Goyanes (Paula) y Antonio Iranzo (Buby):





Producciones amateurs:



 


Aquí tenéis un enlace bastante completo que puede resultar una útil guía para trabajar la lectura de Tres sombreros de copa.


- datos sobre la biografía del autor, Miguel Mihura; 

- información sobre el teatro español de la época;

- mapas mentales y esquemas sobre los elementos y géneros del texto teatral; 

- un análisis de la obra, centrado en la importancia y funciones que en la misma tiene el humor; 

- una recopilación de artículos de crítica sobre la obra aparecidos en la prensa;

- artículos sobre la relación entre Mihura y el cine.
 





martes, 7 de febrero de 2012


Simbología y connotaciones de Tres sombreros de Copa
 

     Esta obra está llena de simbología y connotaciones, con numerosos elementos que también subrayan las diferencias entre los dos mundos de los que hablábamos en la entrada anterior.  


     Algunos de esos elementos simbólicos son:  

         · El teléfono: única forma de comunicación entre Dionisio y su amada.

        · Los tres sombreros de copa: uno de ellos es entregado por el suegro; el otro es el
          mundo absurdo, el del circo; el tercer es con el que hace malabares y finalmente
          el de la prometida, Margarita.

       · Las dos puertas de la habitación: por una, aparecen el suegro y el Odioso Señor,
         ambos pertenecientes al mundo de la burguesía. La otra es por la que entran los
         personajes del circo y que representan el mundo de la farándula y la bohemia.

      · La ventana: es el símbolo de la libertad de Dionisio.

      · Las tres luces del puerto. Simbolizan las tres personas importantes en su vida: el
        suegro, Margarita (su amada) y Paula (la chica del circo), cuyo color de luz es el rojo
       (que denota diferencia de las otras dos, el suegro y su amada, ambos burgueses).

     · La música. El autor definió la obra como “la comedia de las muchachas que adoran la
       música de los gramófonos”. Buby canta canciones tristes con su ukelele. En el
       2º acto, cuando Dio. Está feliz, escucha canciones de moda o silba, pero se da
       cuenta que en los discos del gramófono hay canciones con títulos como “ámame en
       diciembre lo mismo que me amas en mayo”. Por el contrario, el mundo burgués
       prefiere la música romántica y simple que don Rosario toca con su cornetín di pistón:
       romanzas, marchas. Es significativa la Carraca que el Odioso Señor le regala a Paula,
       instrumento de sonido desagradable, y que los otros canten canciones ñoñas y
       Margarita toca en el piano una canción cursi. Con los gustos musicales, Mihura
      diferencia a los personajes: los alegres prefieren las javas francesas y la música
      americana.
 
     Como conclusión, diríamos que Tres sombreros de copa es una de las obras más pesimista, triste y sutilmente crítica del teatro español. A través del humor, explica una historia de libertad, felicidad, amor, autenticidad de sentimientos, cuestiona al matrimonio y censura las carencias de la vida provinciana, tema de larga tradición literaria (Clarín, Galdós, 98…). También pone en entredicho el lenguaje, pilar de la sociedad, y lo utiliza como instrumento de distracción y engaño.

     Pone dos mundos en conflicto, sin embargo, sus protagonistas no rompen con sus orígenes, condicionados por el entorno. Paula sufre también por las mentiras de Dionisio, que no parece en ningún momento dispuesto a abandonar su vida burguesa. Con agria lucidez, Mihura nos dice que a pesar de sus diferencias, los dos mundos son muy similares en cuanto a instinto de conservación y por esto los dos son víctimas de la realidad.

     Existe entre ellos una diferencia fundamental: ella asume la posibilidad de cambiar y asume el riesgo, pero él no lo hace en ningún momento. El autor dijo que “sólo se salva Paula, que vive su romance con una gran verdad”. Por el contrario, Dionisio carece del valor necesario para romper con la vida monótona. Por esto el autor dijo que “es la comedia en la que más tontamente se malogra, para toda la vida, una estupenda felicidad.

     Y los sombreros de copa, vacíos de glamour, de magia y de espectáculo, acaban en el suelo, como las ilusiones de los personajes. A cuántos de nosotros se nos caen los sombreros al suelo por no atrevernos a…





viernes, 3 de febrero de 2012


MIGUEL MIHURA (1905-1977). Tres sombreros de copa





Miguel Mihura nace en Madrid en 1905. Hijo de actor y empresario de teatro, vivió desde niño en el ambiente teatral, lo que influiría considerablemente en su obra.


En 1932 escribe Tres sombreros de copa, obra que no es entendida por los empresarios que se niegan a representarla, por lo que el autor decide cambiar de rumbo y hacer obras de teatro más burguesas, en línea con lo que se lleva en esos momentos. Durante la Guerra Civil funda y dirige La Ametralladora, revista de humor de la zona nacional, donde ya se puede ver su particular concepción del humor que alcanzará un gran éxito con su siguiente revista, La Codorniz, fundada por él en 1941:


                        “Yo recuerdo que La Codorniz nació para tener una actitud
 sonriente ante la vida; para quitarle importancia a las cosas;
 para tomarle el pelo a la gente que veía la vida demasiado
en serio, para acabar con los cascarrabias; para reírse
                        del tópico y del lugar común; para inventar un mundo nuevo,
irreal y fantástico y hacer que la gente olvidase el mundo
incómodo y desagradable  en que vivía. Para decir a nuestros
lectores: «No se preocupen ustedes de que el mundo esté
hecho un asco. Una serie de tipos de mal humor lo ha estropeado
con sus críticas, con sus discursos, con sus violencias.

   Y ya no tiene remedio. Vamos a olvidarlo y a procurar no enredarlo más.
 Y aquí, reunidos, mientras la gente discute y se mata, nosotros,
en un mundo aparte, vamos a hablar de las mariposas, de las ranas,
de los gitanos, de la luna y de las hormigas. Y nos vamos  a reír
de los señores serios y barbudos que siempre están dando la lata y
buscándole los pies al gato». Y por eso los señores barbudos
los dibujaba Herreros dentro de los bolsillos de sus protagonistas,
allí arrinconados, a punto de morir de asfixia.”
Miguel Mihura

Su humor, totalmente original, fresco y descabellado seguía la línea de lo que se hacía en Europa en aquel entonces. Después de vender La Codorniz decide pasarse al cine donde escribirá numerosos guiones y reanudará su creación teatral en 1953, continuándola hasta 1968.

Sin embargo todas sus obras están por debajo de la genial, Tres sombreros de copa, ya que se ve obligado a frenar su libertad creadora y su magnífica imaginación.

Son los años de A media luz los tres, El caso del señor vestido de violeta, y Carlota. Pero alcanzará el éxito total de público con Melocotón en almíbar (1958) y Maribel y la extraña familia (1959). Después habría que destacar La bella Dorotea (1963) y Ninette y un señor de Murcia (1964).

Mihura es, por tanto, la primera figura del teatro humorístico contemporáneo español.

Sus comedias muestran una voluntad de ruptura con el teatro precedente. Tuvo una gran capacidad para crear tramas sorprendentes manejando con gran habilidad toda clase de recursos escénicos y demostrando un gran ingenio en sus diálogos.

A su imaginación hay que añadir su ternura y la belleza de las palabras utilizadas, además de su combinación del humor trágico con el ridículo, que hacen que su obra sea completamente original y única en la historia del teatro español.

Tras esta breve introducción sobre Miguel Mihura que encontramos en “La ciberniz” [http://www.ciberniz.com/ ], página web de la Academia del Humor e inspirada en la revista de La codorniz, nos ayudará a conocer un poco mejor a este autor contemporáneo que se atrevió a romper con el teatro de postguerra conocido entonces   como “teatro de salón” y que inspirado por algunos autores como Becket y Ionesco, renovó el teatro cómico a través de los juegos semánticos y el enredo combinado con el absurdo.

Una de sus obras más conocidas e importantes porque supondrá una nueva etapa del teatro cómico y la cual vamos a comentar es Tres sombreros de copa. Dicen que Mihura la escribió en unos tres meses, y según sus propias declaraciones, la creó «sin esfuerzo» y «con facilidad, con alegría, con sentimiento». Consideraba que había encontrado con esta obra un estilo propio y sin influencias ajenas, y se mostró orgulloso de su «virtud melódica», de su ritmo, de «esa cadencia especial que sonaba a verso».
 

El enfrentamiento de dos mundos

La obra enfrenta dos formas distintas de concebir el mundo por medio de la oposición de dos grupos de personajes. En el reparto, estos dos grupos se sitúan en dos lugares distintos:


1.        En primer lugar, están los representantes de la pequeña burguesía
de una ciudad de provincias: el Odioso Señor, el Anciano Militar, 
el Cazador Astuto, el Romántico Enamorado, el Guapo Muchacho y 
el Alegre Explorador. Las antonomasias (sinécdoques que consisten
en poner el nombre apelativo por el propio, o el propio por el apelativo)
con las que los describe tienen una intención peyorativa, los considera
convencionales como sus nombres (la parodia se relaciona con los 
putrefactos, término que surgió en la Residencia de Estudiantes y fue
muy usado por Dalí. Por esto siempre huelen a podrido).
   Es significativo el Anciano Militar, del que sabemos el nombre,
Alfredo, cuando ya ha regalado todas sus medallas y abandona sus
modales hipócritas y se humaniza un poco. Sólo don Rosario y don
Sacramento no son mencionados por sus antonomasias.

2.        En segundo lugar, figuran los miembros del music-hall, Paula
y las otras chicas. Entre ellos se inserta Dionisio, porque por un momento
se acercará a este mundo. 
    A su vez, estos personajes pueden dividirse en dos grupos, según sus
nombres tengan o no resonancias artísticas: Fanny, Madame Olga,Trudy,
Buby y Antonini, pseudónimo de Dionisio. Luego están Paula, Sagra
y Carmela.



   A medio camino entre los dos mundos y como nexo de ambos están los tres sombreros de copa del título. Esta prenda elegante actúa como un símbolo de las dos formas opuestas de concebir la vida según el autor: en el mundo serio remite a los trajes de etiqueta de las bodas; en el del music-hall, al vestuario de los presentadores y los artistas de magia o malabares. Pero a Dionisio, ninguno de los tres sombreros le da la solemnidad que busca…